Corporal

Este masaje se realiza con movimientos suaves, lentos y repetitivos, aplicados en la dirección del flujo linfático. A diferencia de otros masajes más intensos, el masaje drenante trabaja directamente sobre el sistema linfático, y puede realizarse de forma manual o con aparatología especializada para potenciar sus efectos.

Elimina líquidos retenidos y reduce la hinchazón.
Favorece la eliminación de toxinas y la oxigenación de los tejidos.
Mejora la circulación sanguínea y linfática.
Alivia la sensación de pesadez en piernas y cuerpo.
Estimula el sistema inmunológico, fortaleciendo las defensas.
Ayuda en la recuperación postoperatoria y reduce la inflamación.
Proporciona una profunda relajación y bienestar.

El masaje drenante es ideal para aquellas personas que desean mejorar su bienestar corporal y combatir la retención de líquidos. Está especialmente recomendado en casos de:

• Piernas hinchadas, retención de líquidos y celulitis.
• Personas que pasan muchas horas de pie o sentadas.
• Mujeres embarazadas o en postparto (previa consulta médica).
• Pacientes en recuperación postoperatoria o con edemas linfáticos.
• Personas con mala circulación sanguínea o sensación de piernas cansadas.
• Quienes buscan un masaje relajante y terapéutico para el bienestar general.

• Se recomienda un tratamiento de 5 a 10 sesiones, dependiendo de las necesidades de cada persona.
• Tras la sesión, se sugiere beber abundante agua para favorecer la eliminación de toxinas.
• Para potenciar los resultados, se aconseja mantener una alimentación equilibrada y realizar actividad física regular.
• Es importante evitar el consumo de alcohol y alimentos con exceso de sodio tras el tratamiento.

Desde la primera sesión, se nota una sensación de ligereza y bienestar en el cuerpo. Con un tratamiento continuo, se consigue una piel más firme, reducción de la hinchazón y una circulación mejorada.